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Frotarse los ojos es algo que todos hemos hecho en algún momento y por diversas razones. Ya sea por sueño, cuando nos despertamos, cuando estamos estresados, cuando se nos mete algo en el ojo, etc. Y aunque parece algo inofensivo, lo cierto es que no lo es tanto y puede causar mucho daño a sus ojos.
Algunas razones de porqué frotarse los ojos es malo para su salud ocular.
Irritación y enrojecimiento: Frotarse los ojos con frecuencia puede irritar la piel alrededor de los ojos y hacer que los ojos se enrojezcan.
Infecciones: Las manos pueden contener bacterias y virus que pueden causar infecciones en los ojos si se frotan los ojos con las manos sucias. Las infecciones comunes incluyen conjuntivitis y blefaritis.
Daño a la córnea: Frotarse los ojos con demasiada fuerza puede causar daño a la córnea, el tejido transparente en la parte frontal del ojo. El daño puede causar visión borrosa, dolor y sensibilidad a la luz.
Aparición de arrugas: Frotarse los ojos puede estirar y debilitar la piel alrededor de los ojos, lo que puede provocar la aparición de arrugas prematuras.
Agravamiento de condiciones preexistentes: Si ya tienes una condición ocular como ojo seco o alergias oculares, frotarte los ojos puede agravar la condición y empeorar los síntomas.
Aunque para la mayoría de la gente el hecho de frotarse los ojos ocasionalmente supone un riesgo bajo.
De acuerdo con expertos en la salud ocular, no existe una forma correcta de rascarse los ojos, ya que la fricción puede causar algunos problemas en su salud. De acuerdo con María del Pilar Oviedo, coordinadora de Optometría de la U. CES,”rascarse los ojos puede deformar la córnea, la parte más externa del ojo, y así, producir enfermedades visuales como el astigmatismo y otra llamada queratocono en la que sobresale el tejido transparente en la parte frontal del ojo.
Los datos son alarmantes, ya que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), “en el mundo existen al menos 2.200 millones de personas con deterioro de la visión cercana o distante y al menos 1.000 millones de esos casos, casi la mitad, pudieron evitarse”.
La oftalmóloga Eliana Oliveros advierte que en la capa de la córnea puede haber lesiones como laceraciones, crecimiento de los vasos sanguíneos llamado neovascularización (especies de venas o “arañitas” que no deberían estar en el ojo) y cicatrices reconocidas como leucoma corneal, cambios en la coloración al volverlos más oscuros y producir hiperpigmentación que comúnmente se conoce como “ojera” o “párpado oscuro” y en algunos pacientes puede adquirir un aspecto amarillento en los ojos.
Antes de rascarte los ojos o frotartelos, intenta hacer lo siguiente
Mantener las manos limpias: Lávese las manos con frecuencia para evitar la acumulación de gérmenes y bacterias en las manos, que pueden irritar los ojos y hacer que se sientan incómodos.
Usar pañuelos de papel: Si siente la necesidad de frotarse los ojos, use un pañuelo de papel limpio y suave en lugar de sus manos para evitar la transferencia de gérmenes y bacterias a los ojos.
Evitar el polvo y el aire seco: El polvo y el aire seco pueden irritar los ojos y hacer que se sientan incómodos, por lo que es importante evitar estas situaciones cuando sea posible.
Aplicar compresas frías: Las compresas frías pueden ayudar a aliviar la picazón y la irritación en los ojos. Use una toalla limpia y húmeda con agua fría sobre los ojos durante unos minutos.
Usar gotas lubricantes para los ojos: Las gotas lubricantes para los ojos pueden ayudar a reducir la sequedad y la irritación en los ojos, lo que puede reducir la necesidad de rascarse los ojos.
Hacer ejercicios de relajación: En algunos casos, la necesidad de rascarse los ojos puede estar relacionada con el estrés o la ansiedad. Practique ejercicios de relajación, como la meditación o la respiración profunda, para reducir el estrés y la tensión en el cuerpo.
De acuerdo con María del Pilar Oviedo, es importante tener un parpadeo más consciente y activo en la rutina diaria. Mover más los ojos, ya que por ejemplo, un factor de riesgo del ojo seco es la exposición prolongada a las pantallas, lo que puede sucederle a personas que pasan todo el día mirando sus computadoras.
En resumen, aunque frotarse los ojos ocasionalmente no suele ser un problema, hacerlo con frecuencia o con demasiada fuerza puede tener consecuencias negativas para la salud de los ojos y la piel alrededor de los mismos.
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